Exactamente, ya lo describe Wilde, "La importancia de
llamarse...".
Hoy en día, existen
diferentes economías convergiendo en un mismo lugar: el mundo
mundial, y es cuando vemos que en nichos de mercado, generalmente
donde están los productos "commodity", comienzan a verse
explosiones de productos, con "diferentes" propuesta de comunicación,
precios, colores, nombres, pero al final del día, el mismo mercado
meta...1...2...3!!! que comience la guerra!!!
Parada frente a un anaquel, y con el objetivo
de poder controlar el cabello de mi sobrino...y con la única encomienda de
"no gastar demasiado", que da igual, que solo esta de visita en
casa...me ataca la ansiedad de decisión...12 marcas diferentes, prometiendo lo
mismo, contradiciéndose cuando miro el precio (que no creo que por
$10 pesos me den el mismo resultado de $70 pesos), y que curiosamente, entre
menos cabello tenga el usuario del producto es mayor el precio que se paga!
(cierto! hay goma para cabello de bebé!!!) y bueno...
Vino a mi mente increíblemente la
famosa obra de Wilde, que lejos del contenido, me reflejo perfecto la situación
de dichos productos en el anaquel...la literalidad de la frase "La
importancia de llamarse...", porque mas allá de un nombre
divertido, o uno cobijado por un personaje mundial y tradicionalmente famoso, y
tal...el contenido, dejando a un lado los colores, olores, tamaños, e inclusive
precio, el contenido, lo que se aplica, el producto por el que se paga, con el
cual quiero obtener cierto efecto!, si un químico lo analizara, y aun
sin ello, según dice la etiqueta, son casi idénticos!!! Porque
pagar hasta una diferencia de $60 pesos para obtener el mismo efecto??? me
siguen en la idea???
Diría mi ex profesor...ya se tiene el
chamaco, ahora a nombrarlo! a diferenciarlo! a ponerle nombre, que casi
siempre, ya se tiene el apellido, o se conoce bien, de donde viene.
Empresas de todos tamaños, en ocasiones dejan
en segundo plano el correcto ejercicio del "naming", colocando un
nombre "lógico" que efectivamente, en ocasiones, a NADIE, le hace
sentido, salvo a la persona que lo nombra, evidentemente. Y es precisamente
que volviendo al mercado, así, natural, aquel que llega y le
"late" comprar un producto, dejando de lado todas las ideas que he
planteado anteriormente, se decide asi por un "quiero un moco de gorila"...osea,
como...pooorque??? y la respuesta fue "esta asqueroso! !!" y
efectivamente, fue la compra realizada.
Recordemos entonces que...a veces lo
"lógico" no es lo "adecuado", depende SIEMPRE DE MI
MERCADO, lo que nos lleva a concluir, mercadologos, por favor! hacer caso al
consumidor, su dinero, y gusto es!
Nos seguimos leyendo...